martes, 13 de septiembre de 2016

QUÉ ES EL NIÑO INTERIOR




Autor Anónimo

Es el conjunto de todas nuestras potencialidades en estado puro, que nos habrían de permitir atraer la realización en todas las áreas de la vida. Cuando ocurre que en una o varias áreas no conseguimos vivir plenamente, hablamos del Niño Interior Herido.

Seguidamente se exponen las áreas y los casos más frecuentes de realización y herida.



Amor y Pareja Amor, comunicación, apoyo, compartir, entendimiento, crecimiento.  Desavenencias, chantaje, malos tratos, incomunicación, frigidez, adicciones, impotencia…

Familia y Salud  Cariño, respeto, fraternidad, apoyo, acompañamiento, confianza, seguridad, estabilidad, fuerza, vitalidad… Manipulación, imposición, rechazo, abandono, invalidación, adicciones, proteccionismo, agresiones, enfermedades, accidentes…

Trabajo y Viajes Realización, reconocimiento, valoración, ascenso, armonía. Mooving, inestabilidad, inmovilismo, desinterés, malos entendidos, falta de reconocimiento…

Autorealización Autoestima, completa, integridad, firmeza, conexión,

Alegría interior, sinceridad, poner límites, automotivación… Dejadez, falta de autoestima, inseguridad, tristeza, depresión, dificultad en poner límites, ansiedad, fobias, autosabotaje.

Riqueza Económica Prosperidad, éxito en los negocios, firmeza, equilibrio, confianza, capaz de asumir riesgos… Creencias erróneas acerca de la abundancia, escasez…

Fama y Reputación Reconocimiento social, éxito en la vida en general, constancia, simpatía, don de gentes, determinación, integridad… Autonegación, falta de confianza, inadaptación, dificultades sociales…

Creatividad, hijos, Proyectos Fluidez, adaptación , genialidad, recurrencia, concentración, detección de las necesidades, concreción, inteligencia… Dispersión, rigidez, dificultades en el cambio, estrés…

Amistades Sociabilidad, capaz de ponerte en el lugar de los demás, cordialidad, confianza, aceptación… Egoísmo, introversión, creación de mundos personales, orgullo, intransigencia, falta de comunicación.

Cuando ocurre que en una o en varias de estas áreas, no conseguimos vivir con plenitud, estamos ante un caso de Niño Interior Herido. Ocurre que la persona que tiene un Niño Interior Herido revive una y otra vez, los mismos sentimientos de amargura, vacío, desilusión, tristeza, rencor, miedos, desconfianza, etc. en el área o áreas que tiene afectadas. Tropieza una y otra vez con la misma piedra.

La causa de que esto sea así, radica en las vivencias emocionales que vivimos desde que fuimos concebidos en el vientre de nuestra madre hasta la edad de 9 ó 12 años, -en que pasamos de la mente concreta y autocentrada en el Yo, a la mente abstracta- en relación a las emociones que nos suscitaban nuestros padres y mentores, de modo que sin darnos cuenta, grabamos en el inconsciente sentimientos, actitudes, creencias, en definitiva introyectos, correspondientes a cada una de esas ocho áreas.

Con el tiempo esos introyectos, fueron generando la realidad en la que vivimos, y todo lo que nos ocurre en la actualidad, -hasta que uno no desaprende lo aprendido- consecuencia del modo en que sentimos debían de ser nuestras emociones en cada una de esas áreas, que es lo que luego las personas que aparecen en nuestras vidas se encargan de actualizarnos.

En la medida que la persona transcurre por el proceso de Recuperación de su Niño Interior, deja de afectarle esas emociones, comienza a sanar en primer lugar la relación consigo mismo, y después con cada una de las personas que integran las áreas afectadas: parejas, padres, amistades, jefes, etc.

Para ello aprende a hacerse cargo de lo que hasta ahora proyectaba en los demás, en vez de culpabilizarles de su desgracia, aprende a ver que es lo que le despiertan los demás y a sanar esa vieja espina que reaparece una y otra vez, aunque cambien las personas que se la suscitan.



¿En que consiste el Proceso para Recuperar el Niño Interior? (RNI)

El proceso es sencillo, pero requiere de tres aspectos fundamentales: disposición, voluntad y compromiso, es decir, que la persona desee sanarse y mejorar su vida. Sin estos ingredientes ninguna terapia tendría efectividad.

El proceso consiste en reconocer y conectar las experiencias no deseadas de la actualidad, con las que vivió en el pasado, hacerlas conscientes, darse cuenta que son suyas, liberarlas, ponerse en el lugar del otro para cerrar asuntos pendientes, perdonarse y perdonar, reconciliarse, reparentalizar y consolidar vivencias sanas y plenas en el área que desea mejorar.

Cuando el proceso tiene lugar, se consigue cambiar las emociones que antes eran causa de conflicto, y hasta las personas que eran foco de conflicto, pues cuando uno cambia internamente cambia lo que le rodea.

¿Para que sirve este proceso?



Además de mejorar el área de nuestra vida que queremos sanar: pareja, familia, trabajo, relación personal consigo mismo, etc. la persona deja de tener los sentimientos que le atenazaban, desaparecen los enganches y mejoran las relaciones con los demás, comienza a recuperar su verdadera identidad, su autoestima, el encanto personal, la espontaneidad, y la salud en todos los órdenes de su vida; es capaz de sostenerse y nutrirse a si misma, de modo que comienza a vivir plenamente y a atraer la prosperidad en su vida. El mundo se rinde a sus pies.

¿De dónde surge Recuperar el Niño Interior?

Este sistema de integración humana nace en Estados Unidos, de la corriente psicológica denominada Análisis Transaccional y que es enarbolada por Erich Berne, John Bradshaw, Marianne Wiliamson, Jean Piaget y Antonio Blay entre otros.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario